La amatista o cuarzo morado es el representante del rayo violeta, este es uno de los colores del tercer ojo. El poderoso rayo violeta o rayo amatista representa el paso a una percepción alternativa desde un estado de conciencia normal. El rayo amatista es tan poderoso que puede causar el tránsito de una realidad a otra, gracias a su esencia mágica.
Es la combinación entre el azul y el rojo, un perfecto equilibrio entre dos fuerzas opuestas. El azul es la calma y serenidad, mientras que el rojo es la fuerza, energía desmedida y agresividad.
La amatista es la piedra más utilizada para la práctica de la meditación gracias a sus cualidades: calma, tranquilidad y conexión a tierra. El color ametista causa la vibración más intensa del tercer ojo.
El uso del cristal amatista se remonta a los antiguos griegos, de hecho la palabra amatista viene de la palabra griega ametistos, cuya traducción literal es "No intoxicado".
¿Cómo se utiliza?
Al aplicar el cuarzo púrpura en la zona del tercer ojo o chakra frontal, teniendo el cuerpo recostado boca arriba, manteniendo respiraciones profundas, dejando fluir tus pensamientos, crea una imagen mental de la piedra e imagina que esta crece hasta el tamaño de una montaña, esto facilita el estado meditativo, podemos pasar a otro estado mental de forma muy sencilla.
También se puede utilizar en la piedra, en joyería o como collar para mantener un estado de serenidad constante, o bien puedes llevarlo en tu bolsillo.
Otra buena forma de utilizar los poderes de la amatista es en tu zona de trabajo, cuando sientas presión, angustia o estrés; coloca la piedra en tu mano. Esto te dará serenidad.
Tradicionalmente, algunos soldados utilizaban piedra amatista para decorar sus armas, esto para usarla como amuleto repelente de la muerte y atrayente de gloria.
La amatista y el amor
A esta piedra también se le vincula con el día del amor, ya que ayuda a las personas para mantener intacta su fe y mantener la calma espiritual, dos cualidades necesarias para encontrar el amor verdadero.
Otros beneficios
- Infunde sabiduría.
- Ayuda a superar la muerte de un ser amado.
- Calma la mente.
- Ayuda a aliviar la confusión.
- Ayuda contra las jaquecas.
- Calma el mal genio.